sábado, 19 de junio de 2010

El despistado

El avión ha aterrizado, han parado los motores, ya se apagó la señal que obligaba a usar el cinturón. Sin embargo, nadie se levanta. No comprendo cómo los demás no tienen ganas de abandonar este sitio después de haber experimentado el horroroso vuelo, los ruidos extraños, la explosión, el humo espeso, el terrible zarandeo. Me levanto yo, abro el maletero, saco mi cartera, mi abrigo. Acabo de descubrir que todos me están mirando. De repente me señalan y se echan a reír con una carcajada extraña, una carcajada que parece llena de dolor, y aquí estoy yo con la cartera en una mano y el abrigo en la otra, sin enterarme de lo que sucede.

José María Merino (Del libro La glorieta de los fugitivos)

13 comentarios:

David Moreno dijo...

Buenísmo micro. No darse cuenta... jajjaa

Un saludo indio

Raúl dijo...

Ocurrente. Me parece un miro ocurrente.
Saludos.

Jose Ramon Santana Vazquez dijo...

...traigo
sangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...


desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ


TE SIGO TU BLOG




CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...


AFECTUOSAMENTE
PUERTA FALSA

ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE BLADE RUUNER ,CHOCOLATE, EL NAZARENO- LOVE STORY,- Y- CABALLO, .

José
ramón...

Marcos Callau dijo...

Enigmático suceso.

Celsa Muñiz dijo...

Según iba leyendo pensé que la gente no se movía de su sitio y luego se reaían porque vieron sus pantalones cagados (o meados). Como los del resto del pasaje.

El título no lo entiendo, pues el tipo no es que estuviera despistado ya que relata como fue el vuelo. Quiero decir que se dio cuenta de todo, luego no estaba despistado. Más que despitado es un tipo temerario, o tranquilo, o incosciente, yo que sé...

Olga Bernad dijo...

Ay, Dios, qué miedo, me recuerda a "Los otros" o al niño ese que en ocasiones veía muertos, pero todo en catorce líneas, lo cual tiene muchísimo mérito. Si con catorce hay bastante, quince están de más;-)
Saludos.

Gemma dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Gemma dijo...

Merino tiene una serie de micros dedicados al motivo del "despistado" o del "amnésico" que me encanta.
Todo el libro, de hecho, es una maravilla.
Besos

Xuan dijo...

Me acabas de recordar que rengo que releer a Merino, otra vez.

Gabriel dijo...

De lo que no se da cuenta el protagonista es de que él, como el resto del pasaje, está muerto ("la explosión"); de allí lo de la carcajada llena de dolor. Lo del título, por lo que alguien ha señalado, es discutible. Es un muy buen micro.

Saludos.

Anónimo dijo...

¡Qué bueno el libro de Merino?

Me lo he leído y releído ya unas tres veces.


R.A.

Anónimo dijo...

e¡Qué bueno el libro de Merino?

Me lo he leído y releído ya unas tres veces.


R.A.

Anónimo dijo...

Ups, me he dividido en dos, como las células. Sorry

R.A.