Todos los sábados íbamos a visitar a mi padre al psiquiátrico. Las pastillas le volvían manso. Su mirada bovina, resignada, en ángulo muerto. Cuando nadie me veía le pegaba un puntapié en la espinilla. Por el brazo roto. Por los moratones. Por el mapa de la rabia que habían dibujado sus puños en mi piel. No las sentía o le daba igual. Patadas de algodón a una montaña.
Jesús Aguado (del libro Carta al padre)
Imagen: Raymond Depardon
1 comentario:
guau, qué crudo y qué real.
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