martes, 8 de septiembre de 2009

Cuentos de seis palabras (7)



Caen del cielo estrellas de mar.

La mantis religiosa devora un crucifijo.

Gateando, subieron las trillizas el Everest.

Contempla el pirómano la capilla ardiente.

Hambriento, desviste Saturno a sus hijos.

Duerme la tarántula en mi boca.

Ávido de abrazos, compré un pulpo.

Disculpen, ¿me puedo ir suicidando ya?

14 comentarios:

Nacho Viñuela dijo...

Javier,
¡Qué placer recibir una nueva dosis de tus cuentos de seis palabras! No sé por qué desiertos habrás transitado este verano, pero el periplo ha merecido la pena porque, en mi opinión, te has superado a ti mismo. Ocurrentes, despiadados y ferozmente melancólicos. Geniales.
Un abrazo octópodo,
Nacho

BB dijo...

Javier: De acuerdo con Nacho:
te has superado. Difícil escoger
alguno.

Esas estrellas de mar, que caen
del cielo.

La mantis devorando un crucifijo.

Esa piromanía subjetiva.

Comprarse un pulpo por avidez de
abrazos.

Saturno tan prolijo antes de
engullirse a sus hijos.

El suicida que pide permiso...

Como siempre, genial.
Besos
BB

Gemma dijo...

Hombre, pues no le damos permiso. Lo cierto es que le he tomado gusto a sus hexarrelatos. ;-P
Un abrazo

Olga Bernad dijo...

Bueno, me mojo: me quedo con el cuarto.
Saludos.

Carlos Frontera dijo...

Como sigas dando muestras del mismo ingenio y talento, pronto dispondrás de un buen puñado de cuentos de seis palabras para armar un libro al modo de las "Gregerías" de Ramón Gómez de la Serna.
Un abrazo boquiabierto.

Miguel Baquero dijo...

Qué buenísimas tus cuentos de seis palabras. Estás hacieno escuela. el de la capilla ardiente me ha arecido genial. Yo también me quedo con él.

El de las trillizas y el Everest no lo he entendido

Deprisa dijo...

Todos geniales, pero yo me quedo con el del pulpo sin duda alguna.

Javier Puche dijo...

Nacho: el placer es mío. Tener lectores de tu alcurnia, entusiastas y fieles, es lo que da sentido a este blog. No te quepa duda. Este verano he visitado islas misteriosas y mundos perdidos. De allí traigo mis infracuentos. Un abrazo de pulpo.

BB: Te remito al comentario anterior, amiga transoceánica. Tu visita es un regalo siempre.

Gemma (otrora Mega): Bah, eso del suicidio era sólo una pose. Confieso que la existencia no me incomoda del todo. Gracias no obstante.

Olga: El cuarto es también uno de mis favoritos. Estuve a punto de cambiarlo in extremis por "Abandona el pirómano la capilla ardiente". Pero finalmente quedó como lo has leído. Quizá resulte algo más inquietante así. Un saludo incendiado.

Javier Puche dijo...

Viajero: Estos hexacuentos rinden tributo precisamente a las greguerías, cuyo fulgor siempre quise imitar. Me alegra que hayas señalado el vínculo. Gómez de la Serna, maestro de brevedades, tiene descargas de ingenio realmente mortíferas.
Otro abrazo para ti.

Miguel: El precuento de las trillizas no pretende ser más que una imagen de naturaleza onírica, un tanto perturbadora. Puestos a buscarle un sentido, digamos que podría constituir una exaltación de lo ínfimo frente a lo grande. Pero no me hagas ningún caso.

Deprisa: Gracias por venir. El pulpo te manda uno de sus abrazos sin final.

clar dijo...

conciso.

Castigadora dijo...

No sabría explicarlo, pero esta: Contempla el pirómano la capilla ardiente, es la que más me llegó

Un beso

Xocas dijo...

Me han gustado estos cuentos. El del pulpo en concreto me parece verdaderamente brillante. Lo que no quiere decir que los otros no lo sean, sino que a mí me gustan los pulpos. Y el pulpo ;))

Saludos.

un pobre barquito dijo...

...si...

Pablo Copola dijo...

...si muerto lo vas a hacer aún mejor, por favor, no te cortes...
Un placer el encontrarte, saludos.